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¿De qué trata este artículo?: Descubre por qué una estufa de pellets se apaga y cómo resolverlo, garantizando una calefacción eficiente y sin interrupciones.
Puntos clave:
- Causas comunes de apagado.
- Mantenimiento y limpieza necesarios.
- Problemas de suministro de pellets.
- Ajustes y configuraciones.
- Consejos para un funcionamiento estable.
Encender la estufa de pellets es muy sencillo, no suponiendo ningún problema para la mayoría de usuarios. No obstante podemos encontrarnos con situaciones inesperadas, como por ejemplo que la estufa de pellets se apaga y no sepamos cómo afrontar el problema. Este suele ser uno de los errores más comunes en las estufas y, para resolverlo, deberemos prestar atención a ciertos puntos de la estufa.
Cómo reparar una estufa de pellets
Antes de optar por la vía fácil, en este caso llamar al servicio técnico, podemos localizar la causa del problema atendiendo a varias características que te explicaremos a continuación y quizás no conocías. Si tras observarlas detenidamente y cerciorarnos de que están en perfecto estado el error de la estufa de pellets persiste, no nos quedará otro remedio que acudir a un especialista.
El primer punto a tener en cuenta cuando vas a utilizar una estufa es asegurarte de que todos los pellets a utilizar son de buena calidad. Deben contar con el certificado y sello de calidad EN Plus A1, de esta manera podemos tener la certeza de que empleamos combustible que no ponga en riesgo la propia estufa de pellets. Comprar pellets a un precio muy reducido puede ser tentador para el bolsillo, pero salirnos caro con el paso del tiempo. El uso de pellets sin certificado o cuya materia prima es cuestionable provocará que la combustión no sea la correcta, así como una acumulación mucho mayor de residuos.
Otro de los aspectos a tener bajo vigilancia si la estufa no funciona correctamente es el quemador. Hablamos de una de las zonas más sensibles y uno de los motivos por los que la estufa de pellets se apague, solo en caso de no estar cuidada. El quemador es el área dónde los pellets combustionan, por lo que su mantenimiento debe ser exhaustivo. Independientemente del tipo de estufa, cada 30 o 45 minutos este quemador se abre para producir la entrada de aire y dejar caer los restos de pellets quemados en forma de ceniza.
El quemador también puede convertirse en un problema cuando configuramos la estufa de pellets a potencia mínima. La entrada de aire para dejar caer los restos de pellets provoca que la llama se apague. Esto ocasiona que durante los minutos posteriores los pellets sigan cayendo, pero no se quemen. Al no alcanzar la temperatura óptima, la estufa se enfría y por tanto se apaga.
Los intercambiadores de calor son otra de esas piezas que no deben pasarse por alto a la hora de tener en cuenta los motivos por los que se apaga la estufa de pellets. A través de los intercambiadores pasa el humo que se encarga de calentar los tubos y generar aire caliente. Si los intercambiadores no funcionan de manera correcta, los residuos no caerán sobre los filtros. La falta de circulación de aire en esta zona impide por completo que la llama prenda. Podemos realizar la limpieza de estos tubos por nuestra cuenta. Dependiendo del tipo de estufa que tengamos, ésta puede incluir herramientas en forma de limpiadores que facilitan el proceso. En otros diseños más actuales, la limpieza de los intercambiadores puede realizarse de manera automática.
Desde Bioforestal recomendamos encarecidamente la revisión anual y al completo de la estufa de pellets, solicitándola a través del SAT de la marca. Es importante que tengas esto en cuenta, pues no sólo basta con la revisión que puedas hacer a diario o semanalmente.