6 abril , 2021

A la hora de comprar pellets debemos fijarnos en varios puntos clave para que no nos den gato por liebre. Uno de los primeros puntos en los que debemos fijarnos es el certificado de calidad, siendo éste el que realmente nos indica el tipo de calidad del producto a adquirir. Otro de los métodos para conocer la calidad de este combustible de biomasa es sumergir pellets en un vaso de agua. Una sencilla prueba que no nos llevará más de unos minutos y con la que podremos responder a la pregunta de cómo saber si un pellet es de calidad. 

La prueba del vaso de agua para saber si el pellet es de calidad

El truco del vaso de agua y los pellets es muy fácil, desvelando así si realmente nos encontramos ante un producto de calidad o no. Para ello necesitamos un puñado de pellets y un vaso de agua,  más que suficiente para tener todos los ingredientes preparados. 

  • Llena un vaso de agua hasta la mitad.
  • Vierte los pellets en el vaso
  • Al principio los pellets deberían hundirse, indicando una buena densidad, superior a la del agua. 
  • Pasados entre 10 y 15 minutos, los pellets deberían hincharse a medida que van absorbiendo el agua.
  • En caso de que ninguno de estos dos últimos puntos se cumpla, estaremos ante un pellet de baja calidad, ya que significa que su humedad es muy alta y por tanto tendrá menor poder calorífico.

En caso de que el pellet no sea de buena calidad, apenas se hinchará, conservando el vaso la gran mayoría de agua. 

Uno de los principales motivos que determinan la duración o el rendimiento de un pellet se debe al grado  de humedad que contienen. A su vez, el contenido en finos es el principal indicador de la cantidad de cenizas que se generará con la quema de dicho pellet, y por tanto tendrá una relación directa con el mantenimiento de dicha estufa.

Cómo saber si un pellet es bueno 

A primera vista podemos identificar si un pellet es de buena calidad atendiendo a varios detalles. Por ejemplo, un pellet de calidad frente a uno que no lo es destaca por su brillo y bajo contenido de finos o polvo; además su textura es lisa y uniforme. Por otra parte y una vez sobre la mano, si el pellet no cuenta con cortes o grietas de ningún tipo, estaremos frente a un producto de calidad. 

La prueba del agua es una forma rápida de demostrar si tenemos un combustible de biomasa con escasa humedad, lo que nos llevará a un mayor rendimiento del producto. Al mismo tiempo, un pellet con muchos finos generará más ceniza, requiriendo que el mantenimiento de la estufa sea más frecuente para evitar que el aparato se estropee.
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